Satisfacción municipal por la concesión de aguas públicas del río Tablillas a los moradores de la Venta de la Inés

Felipe Ferreiro Alarcón, en primer término, da explicaciones al alcalde y a la primera teniente de alcalde de Almodóvar sobre el curso del río Tablillas. El alcalde de Almodóvar del Campo, Vicente de Gregorio, ha mostrado su satisfacción por la Resolución de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir otorgando concesión de derechos de uso de agua pública a los propietarios de la secular Venta de la Inés.

“Esta autorización administrativa debe poner fin a un amplio periodo de tiempo en el que la humilde y hospitalaria familia afincada en pleno corazón del Valle de Alcudia ha reclamado algo a lo que estaban legitimados y que sólo la sinrazón de vecinos insolidarios estaba privando”, ha manifestado el primer edil almodovareño.

De Gregorio, quien ha recordado la reciente puesta en funcionamiento del tendido de suministro eléctrico o la adecuación del camino que conecta con la carretera N-420, considera que esta noticia es un logro más “de todos aquellas entidades y colectivos que hemos aunado esfuerzos en pro de estas gentes que nunca han reclamado otras cosas que aquello a lo que tenían derecho”. En este sentido,  el alcalde de Almodóvar del Campo ha expresado también su agradecimiento a la Diputación Provincial de Ciudad Real y a la Asociación de Amigos de la Venta de la Inés.

Concretamente, el otorgamiento y consiguiente inscripción en el Registro de Aguas de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir se ha realizado de acuerdo a una serie de características y condiciones especiales, tales como que la corriente o acuífero de la que podrá hacerse uso no es otro que el río Tablillas que, como se sabe, discurre por las inmediaciones del cervantino enclave.

Asimismo, está reconocida que la clase y afección de este otorgamiento se refiere a usos domésticos y consumo sin bebida, siendo el caudal concesional de 0,05 litros por segundo, con un volumen global al año que no debe exceder los 450 metros cúbicos.

Específicamente, se establecen condiciones como que la toma se realizará por gravedad, el hecho de que queda explícitamente prohibido el uso del agua para bebida y elaboración de alimentos, que la Venta de la Inés queda obligada a respetar los caudales ambientales que en cada momento se determina, sin derecho a indemnización no pudiendo derivarse en ningún caso más de un tercio del canal fluyente y, por último, que la concesión se otorga por un periodo máximo de veinte años.

En el documento administrativo firmado en Sevilla se incluye también en el apartado de observaciones la existencia de una presa de hormigón en el cauce, existiendo desde tiempo inmemorial.